La Corte Suprema de España condenó a Alfredo Sáenz, director ejecutivo del Banco Santander, a tres meses de prisión y lo inhabilitó para ejercer funciones en instituciones bancarias por el delito de acusación falsa contra deudores de Banesto, entidad que presidió tras ser intervenida en 1993.
La corte rebajó la pena que había impuesto la Audiencia Provincial de Barcelona en diciembre de 2009, cuando fue condenado a seis meses de prisión.
Una vez conocida la sentencia, el ejecutivo anunció que pedirá el indulto al gobierno para frenar la orden judicial. Sáenz alegará que en su caso concurren “razones de justicia, equidad y utilidad pública”, y apelará a su trayectoria profesional, argumentando que ha ayudado al sistema financiero y, con ello, a la economía española en su conjunto, informó ayer el periódico español Expansión.
Sáenz cuenta con el respaldo del banco, que ayer se manifestó ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) diciendo que, pese a que respeta las decisiones judiciales, ratifica su confianza para que continúe en sus funciones como director ejecutivo del banco.
La corte rebajó la pena que había impuesto la Audiencia Provincial de Barcelona en diciembre de 2009, cuando fue condenado a seis meses de prisión.
Una vez conocida la sentencia, el ejecutivo anunció que pedirá el indulto al gobierno para frenar la orden judicial. Sáenz alegará que en su caso concurren “razones de justicia, equidad y utilidad pública”, y apelará a su trayectoria profesional, argumentando que ha ayudado al sistema financiero y, con ello, a la economía española en su conjunto, informó ayer el periódico español Expansión.