Un año en el mercado de criptomonedas da para mucho, también en el ámbito de sus correlaciones. A lo largo de este año el bitcoin registró niveles récord de "sintonía" con los mercados "tradicionales".
De acuerdo con las cifras de Deutsche Bank,durante todo un mes, en septiembre, lacorrelaciónmedia delbitcoin con el índice S&P 500, de referencia en Wall Street, alcanzó el 64%, y el 68% en el caso del índice tecnológico Nasdaq. En periodos más breves esta correlación se disparó hasta rozarpeaks del 90%.
Pero los últimos meses, en especial a raíz de la crisis generada por el colapso de la plataforma de criptomonedas FTX, han "despegado" la cotización del bitcoin de la del Nasdaq. A falta de dos jornadas para el cierre del ejercicio, el índice bursátil tecnológico roza el 34% de caídas en 2022. La cotización del bitcoin casi duplica este porcentaje, al sumar pérdidas del 64%.
Elbalance final de 2022depara losmayores paralelismos del bitcoincon uno de los integrantes más populares del Nasdaq,Tesla.
Elon Musk, fundador del fabricante de vehículos eléctricos y uno de los mayores iconos entre los promotores de las criptomonedas, no es el único nexo común entre los dos activos. El bitcoincae un 64%este año, prácticamente en línea con el68%que se deja Tesla.
Sus cifras en términos decapitalizacióntambién presentan caminos paralelos. Hace un año tanto el bitcoin como Tesla rozaban la barrera del billón de dólares de capitalización. A día de hoy la valoración de la criptomoneda se ha desinflado hasta los US$ 320.000 millones, y la de Tesla se ha desplomado hasta losUS$ 36.000 millones.
Los gráficos de cotización tanto del bitcoin como de Tesla coinciden igualmente en suprimera gran oleada bajista del año, la sufridaen el mes de marzocomo consecuencia del inicio del nuevo ciclo alcista en los tipos de interés por parte de laReserva Federal. El endurecimiento en las condiciones de financiación provocó un repunte de la aversión al riesgo que pasó factura, sobre todo, a los activos menos defensivos y más revalorizados en el ciclo monetario anterior, un periodo en el que habían brillado con luz propia tanto el bitcoin como Tesla.
Con posterioridad, el bitcoin volvió a agravar su desplome en mayo, coincidiendo con elcolapso de Terra/Luna, y en noviembre, debido a la bruscaquiebra de FTX. En el caso de Tesla sus acciones evitaron una nueva espiral bajista hasta finales de septiembre, poco antes de confirmarse definitivamente lacompra de Twitter por parte de Elon Musk. A las ventas de acciones llevadas a cabo por el fundador de Tesla se sumaron los temores de los inversores a que Musk centrara sus tareas directivas en la red social más que en el fabricante de vehículos eléctricos.
A punto de finalizar 2022, Tesla y el bitcoin cotizan muy cerca de susmínimos de dos años, a la espera, entre otros muchos factores, de que un denominador común, la Fed, alivie las presiones bajistas sobre dos de las inversiones estrella de años anteriores.